Polémica en el blog

Querido blog:

Hoy te escribo para contarte algunas cosas que no me preocupan, pero a otras personas sí.
Resulta que blogudeando a veces me entretengo más con los comentarios que con los post mismos. Y bueno, qué querés, pelea de acá, pelea de allá, anónimos multiplicados por mil, declaraciones de amor (siempre anónimos), insultos (siempre anónimos), en fin, un sin fin de pelotudos y pelotudeces escritas que, aclaremos, me entretienen bastante.

Por ejemplo, a veces noto cierta preocupación por la aparición de los anticristos de la net, sí, los "llamados" anónimos. Oh!, qué terrible. Pero bueno, hay mucha gente que se pone histérica y no los tolera, pero a mí me simpatizan mucho. Me gusta su presencia. Pero firmemente, creo que justamente ellos son los que más se ponen histéricos. Deben salir a la calle (si es que salen de sus guaridas cibernéticas), y deben estallar de la bronca cuando el dueño del blog les contesta u otro visitante lo hace. Pero claro, el anónimo arremete nuevamente contestando nuevas idioteces que son más insultantes, no por las palabras en sí, sino porque piensa que otras personas podrían realmente sentirse... dolidos? por sus inteligentes comentarios, usualmente adjuntos de grandes horrores ortográficos.
El anónimo en fin, es necesario. Queremos su presencia. Y así le daremos su debida atención, y lo maltrataremos con una sonrisa (en el fondo maliciosa, por el placer de hacer bullying virtual).

Concluyendo, deberían darse cuenta los bloggers, que justamente los anónimos sirven para revertir esa bronca con la que ellos se sienten impulsados para "comentar", y así destrozarlos, y hacer de ellos, el payaso del día.

Quiero decirle a todos los anónimos amigos: Métanse los comment en el *%&@. Y muchas cosas más, pero bueno, me encanta decirles esas cosas, aaahhhhh, es estúpidamente relajante, pero sirve. jaja.

Al final tomé una actitud de anónima, entendés, querido blog? Pero bueno, hay que hacer eso, como dije antes, los anónimos son tan imberbes que no se dan cuenta que los más insultados son ellos mismos.

Iba a hablarte de algo más referido a los blogs, pero ahora me voy al cine a ver una película altamente pedorra.

Hasta la vista, blogudos.